dimarts, 21 de juny del 2016

JW GODWARD: EL TRÁGICO FINAL DEL CLASICISMO






Cuando te planteas estudiar la vida y la obra de John William Godward (9 agosto 1861 - 13 diciembre 1922) que fue un pintor Inglés del final de la época neoclasicista, además de la prácticamente ausencia total de información sobre su vida –por razones que explicaremos más adelante-, pronto descubres la injusticia que la crítica y la historia del arte “oficial” llevan a cabo con determinados artistas, o bien porque sus gustos artísticos son demasiado avanzados –los menos- para su época, o más a menudo, porque han nacido demasiado tarde para los gustos cambiantes de las sociedades que los acogen, como es el caso de Godward, del que vamos a hablar en la entrada de hoy. Vivimos en un mundo que admira a los “primeros” por encima de a los que se “mantienen” a lo largo del tiempo.
Autor de una extensa obra, caracterizada por una serena belleza y una ejecución técnica asombrosa, 




las pocas líneas que los estudiosos hacia él, dirigen se limitan a caracterizarlo con frases del estilo de: “un clon de Alma-Tadema”, “un pedante del pincel”, o más frecuentemente y no sin cierto desprecio, como: el “pintor de un mundo insípido de mujeres lánguidas en bancos de mármol”.
Afortunadamente, en la década de 1990, apareció : “J.W. Godward: the Eclipse of Classicism”, de Vern Grosvenor Swanson, obra que nos permite conocer en profundidad la biografía humana y artística de nuestro autor y que podéis ver aquí:


y en la que nos hemos basado para la confección de la presente entrada.
De la que deberéis perdonar mi traducción. 
Como veremos, fue mucho más que eso, hasta el punto que tras la muerte de Alma-Tadema, Godward se convirtió indudablemente, en la máxima figura de la pintura neoclásica inglesa, en unos momentos históricos en que el gusto por este estilo artístico se iba desvaneciendo bajo el brillante resplandor de las vanguardias y los “ismos” del S.XX. 
En la obra de Godward vemos el resumen final de más un milenio de influencia  de la antigüedad clásica en el arte occidental. Al lado de la cristiandad era, con mucho, la mayor influencia de la cultura y el arte europeo. Ese interés por la consecución de la Belleza ideal, iniciado en el Renacimiento (quattrocento) y continuado por el Barroco y el Romanticismo, desapareció durante la generación de Godward, asesinado, por así decirlo, por las filosofías nihilistas contemporáneas. Si bien las referencias, por parte de algunos otros artistas, que apuntan hacia el Clasicismo han continuado hasta hoy, la retórica idealista que lo acompañaba ha muerto.
Godward, se nos presenta, como uno de los más grandes profesionales del ideal clásico. Su arte representa la suma de este increíblemente importante paradigma. Godward se ha convertido en una especie de microcosmos de todos los clasicistas durante un período llamado acertadamente "El ocaso de los dioses" o "El eclipse del Clasicismo." 

Primeros años 
Godward nació en 1861 y vivió en Wilton Grove, Wimbledon . Hijo Sarah


 y John Eboral Godward (un empleado de inversiones en la Ley Life Assurance Society, Londres)

 de posición económica adinerada.
Era el mayor de cinco hijos. Se le pusieron los nombres de su padre y abuelo John y William. Fue bautizado en la iglesia de Santa María en Battersea en 27 de octubre de 1861. La prepotencia de su padre y una educación excesivamente estricta, severa y muy religiosa, le hicieron solitario y tímido en la edad adulta. En cuanto a su primera educación, sabemos que sus calificaciones escolares no fueron demasiado buenas; aunque tenía la “mala fama” de ser el artista de la escuela. Incluso en casa, al principio no veían con malos ojos esa habilidad para el dibujo, con los carboncillos de la chimenea. “Cosas de críos”, pensaba su padre, mientras procuraba introducirlo ya desde muy joven, en el mundo de los negocios, o de la arquitectura, en el despacho de un arquitecto conocido de la familia. 
A los 16 años, JW Godward entró a trabajar por mandato de su padre en la compañía de inversiones en la que trabajaba, pero también, fuera del horario laboral, colaboraba en el despacho de arquitectos de su conocido. Según parece tras dos años de permanencia en él, adquirió cierto conocimiento sobre la decoración de interiores y especialmente en la representación pictórica del mármol.
Parece ser, que a principios de 1880, iba a clases – a tiempo parcial - en la Real Academia de la Escuela de Arte en Burlington House en Piccadilly, aunque no hay constancia oficial de ello. Por aquellos años, estudiando arte a escondidas de sus padres, fue tomando contacto con los más afamados maestros de su tiempo Alma-Tadema , Lord Leighton y Poynter , los cuales podrían haber ejercido una influencia sustancial sobre el artista. Hacia 1882 parece que estudia más seriamente en la Escuela de Arte de San Juan Wood, aproximándose al arte de JW Waterhouse y otros artistas reconocidos de aquellos años.
Hemos visto que se le ha acusado de ser un “clon” de Alma-Tadema, de quien fue protegido, sin embargo, es sólo en los fondos –localizaciones- y en los pertrechos –decoraciones, mobiliarios, etc.- de sus clásicas escenas que se muestra una cierta similitud con Alma-Tadema. 


En los pliegues intrincados de las prendas clásicas que visten sus modelos, muestra una mayor afinidad a Lord Leighton. 



Su fascinación por las posturas un tanto torpes de sus composiciones de –muy a menudo - una sola protagonista refleja más a Joseph Albert Moore, 


mientras que sus referencias arquitectónicas emulan a Edward John Poynter.


Por lo general, sus pinturas no explican ninguna historia, ni heroica, ni mitológica, se centran en una sola chica, grande en el lienzo, que viste prendas semi-translúcidas drapeadas o desgastas, excepcionalmente nos presenta algún desnudo, dando como resultado, una sensualidad un tanto disminuida por la cuidada composición clásica del resto de la imagen. A menudo, el modelo es reconocible como “su chica italiana”, con el pelo negro con raya en medio, muy grandes los ojos, las cejas gruesas y una cara redondeada. 

Cuando Godward terminó sus años de estudiante en arte su deuda con William Clarke Wontner,


a quien conoció durante sus años de permanencia en el estudio de arquitectura, quien fue primero su maestro, después amigo y finalmente seguidor,  era inmensa. Su pincelada, la calidad de la pigmentación, la dependencia de la composición a una única figura, el llegar a ser pintor de la “belleza", son elementos que le vienen en un grado mayor o menor de su relación juvenil con Wontner. Algunos periodistas sensacionalistas, sostienen que hubo una relación homosexual entre ambos. Nada en la obra, ni por lo poco que sabemos de la vida privada de Godward permite dar valor a semejante opinión, más bien se suele afirmar que Godward fue un enamorado de la belleza femenina y veremos que se le atribuyen diversas relaciones sentimentales con sus modelos.

Carrera 
Expuso por primera vez en la Real Academia de 1887, es decir cuando contaba 26 años. Tarde, quizás, para quien hubiera podido cursar unos estudios normativos, no tanto, para Godward que fue esencialmente un autodidacta que se formó mucho por intuición y muchísimo más por el trabajo constante.
Durante su carrera, su dedicación a la pintura fue casi obsesiva, pintó una media de catorce cuadros cada año, excepto en aquellos en que la enfermedad o sus viajes se lo impidieron. El éxito, le acompañó desde muy pronto y aunque sus obras no adquirieran los precios de Alma-Tadema u otros autores más renombrados de la generación anterior, le permitieron siempre vivir con holgura. Aunque fue solitario, tímido y retraído, también fue cortés, amable, agradable en el trato, fiel a sus amigos y responsable de sus obligaciones profesionales. Por lo demás, parece que llevó una vida bastante corriente. A diferencia de otros grandes artistas de su tiempo, guardó celosamente en la intimidad su vida cotidiana, con las dos excepciones de las que hablaremos a continuación.
El primer escándalo se produjo cuando se trasladó a Italia con una de sus modelos en 1912, su familia que no había visto con buenos ojos su dedicación al arte pues -consideraban a los artistas como poco menos que unos vagos viciosos, gente poco religiosa y nada recomendable-   rompió todo contacto con él. La citada modelo, según algunas hipótesis Lilian Pettigrew, generalmente conocida como Lily Pettigrew, 


fue la amante y modelo casi exclusiva del pintor JohnWilliamGodward, con quien, al parecer, se trasladó a Roma en 1912. Lily era la tercera de los doce hijos (nueve varones y tres hembras) de William Joseph Pettigrew, cortador de corcho, y Harriet Davis, que ayudaba a la casa con trabajos de costurera. Hacia 1882, tras el repentino fallecimiento de su padre, con doce años, Lily marcha a Londres con su madre y sus dos hermanas, Rose (n. 1872) y Hetty (n. 9 de octubre de 1867), donde se introducen en el mundo artístico, llegando a ser modelos de pintores como JamesMcNeillWhistler, WilliamHolmanHunt, John Everett Millais (quien las describe como «tres gitanillas»), Theodore Roussel, JohnWilliamGodward y otros.


Hetty Pettigrew

Dice Rose Pettigrew: “Nos pusimos de moda entre los artistas. Muchos hasta intentaban sobornarnos para lograr que posáramos para ellos; pero éramos demasiado orgullosas para caer en esa clase de argucias. Rara era la exposición en que no había algún retrato de «las bellas señoritas Pettigrew», como nos llamaban. Nunca posamos por menos de media guinea al día, lo que, en aquellos tiempos de estrecheces, era mucho dinero”. 





Y añade: “Lily tenía el pelo rizado y rojizo, los ojos color violeta, la boca hermosa, la nariz clásica, la cara bien formada, el cuello largo y proporcionado, una figura exquisita: era perfecta”.
Lily apareció hasta en un total de 21 obras del pintor:

Baño Pompeiano

1890
Una sacerdotisa
1893
Una sacerdotisa
1894
Travesura y reposo
1895
Campaspe  (estudio)
1896
Campaspe
1896
Venus atándose el pelo
1897
Venus en el baño
1901
Atenea
1908
En las termas 
1909
En el tepidarium
1913
Aficionada
1915
Bajo la flor que cuelga de la rama
1917
Un recuerdo
1920
Retrato de Lily
1887
Esperando una respuesta
1890
Pensamientos lejanos
1897
Belleza clásica
¿
Rosa de verano
1902
Belleza romana
1912
Myrinna
1915

Según otra de las hipótesis, la modelo que le acompañó a Italia fue “su modelo italiana”, de la que no sabemos por el momento, la identidad, aunque pudiera ser Marietta Avico (?) quien sería su modelo, particularmente en los últimos años de su vida.





Sin grandes sobresaltos, su obra se mantiene prácticamente inalterable a lo largo de las tres décadas en que mantuvo la actividad, de tal manera que si no eres un gran experto, no podrías determinar el año en que una obra determinada fue pintada.
Obras   
Como ya hemos dicho, Godward era un neoclasicista de estilo victoriano, y por lo tanto, un seguidor de las teorías de Frederic Leighton . Aunque esté más estrechamente vinculado estilísticamente, sin embargo, a Sir Lawrence Alma-Tadema, con quien compartió una inclinación en la presentación de la arquitectura clásica, en particular, pero también en el paisaje, en la estética de los edificios construidos a partir de mármol. Aunque otros estudiosos lo acercan a un Prerafaelismo tardío; incluso para la prestigiosa cadena de subastas Sotheby, Godward sería un pintor simbolista. 
La gran mayoría de las obras existentes de Godward presentan a mujeres en vestido clásico, que contrasta con los elementos del paisaje o arquitectónicos, aunque hay algunas figuras de semi-desnudos y completamente. Los títulos reflejan fuente de inspiración de Godward: la civilización clásica , sobre todo la de la Antigua Roma (de nuevo un tema Godward unión estrechamente a Alma-Tadema artísticamente), aunque la antigua Grecia a veces cuenta, proporcionando así los lazos artísticos, aunque de forma más limitada, con Leighton. Se dice que muchos de los nombres de los cuadros, se corresponden con unaa larga lista de nombres greco latinos que Godward poseía y que los ponía un tanto al azar.




Dado que la erudición clásica era bastante extendida entre el público potencial de sus pinturas – mediana y alta burguesía adineradas-durante su vida de lo que es en la actualidad, la investigación minuciosa del detalle era importante para alcanzar una posición como artista de este género. Alma-Tadema era, al mismo tiempo que un pintor, un arqueólogo , que asistió a los sitios históricos y los artefactos recogidos en sus expediciones más tarde se usaron en sus pinturas. Godward, también, estudió los detalles tales como la arquitectura y el vestido, el mobiliario, con el fin de asegurarse de que sus obras llevaban el sello de autenticidad, aunque sin la minuciosidad de Alma - Tadema. 
Además, Godward incorporó cuidadosa y meticulosamente otras características importantes en sus pinturas, como pieles de animales y flores silvestres. La aparición de bellas mujeres en poses estudiadas en muchos de los cuadros de Godward hace que muchos recién llegados a sus obras le puedan calificar erróneamente como prerrafaelita, especialmente en lo que su paleta se refiere que es a menudo de un vibrante colorido. La elección del tema (la civilización antigua en comparación con, por ejemplo, la leyenda artúrica) es más adecuada para el neoclásico victoriano: sin embargo, es conveniente comentar que en común con numerosos pintores contemporáneos, Godward era un 'soñador' , produciendo bellas imágenes de un mundo que, todo hay que decirlo, demasiado idealizado y romántico, y que en el caso de ambos Godward y Alma-Tadema, llegó a ser criticado como una visión del mundo de 'victorianos con togas'.



Godward estableció rápidamente una reputación por sus pinturas de mujeres jóvenes en un entorno clásico y su capacidad de transmitir con sensibilidad y dominio técnico  la sensación de contraste de texturas, la carne, el mármol, la piel y los tejidos. El último renacimiento clásico a gran escala en la pintura occidental floreció en Inglaterra en la década de 1860 y floreció allí durante las siguientes tres décadas." 
Veamos alguna de sus obras, con más detalle:






Carina fue pintado durante la breve estancia de Godward en Roma en 1910, cuando estaba haciendo planes para trasladarse de manera más permanente a ItaliaDe acuerdo con una carta en la colección Milo-Turner, Carina se completó antes de diciembre de 1910. 
Carina es un buen ejemplo de los busto retrato en el que la representación alcanza cotas muy altas de perfección. 
El tono tibio de la piel, la sensación fría del mármol, la tela diáfana, se expresan en su forma más condensada y abstracta. A diferencia de Sir Lawrence Alma Tadema, Frederic, Lord Leighton y Edward Poynter, cuyas representaciones de las damas griegas de medio cuerpo, casi siempre retratan heroínas históricas o mitológicas, las imágenes de Godward son menos formales y representan un tipo de belleza femenina en lugar de una identidad específica. 




La elección del título, derivado del nombre de la virgen clásica del antiguo reino de Caria en el oeste de Asia Menor, no es más que una mirada reflexiva a la austeridad de la Antigüedad. El nombre Carina no sólo sugiere la pureza de la virginidad devocional, sino también la sensualidad húmeda del exótico oriente. Sin embargo, esto es secundario a las armonías de decoración de color teñida de forma sensual y elegante. Los objetivos de Godward eran pintar una forma estética más del Clasicismo, libre de la narrativa y la acción y se concentra sobre la belleza de la forma y el color. Hablaremos de ésta modelo en el retrato de Ethel Warwick.






En el Tepidarium. Después de ganar una medalla de oro en la Roma Internationale . Exposiciones en 1913, año en que el presente trabajo fue pintado, la producción creativa de Godward se fortaleció con rapidez En el tepidarium, demuestra todos sus puntos fuertes icónicos: exigentes representaciones de varias losas de mármol, estudios de cortinas en tonos translúcidos, y una representación cuidadosa y reverente de un único modelo femenino. Desnudos sin cortinas son poco frecuentes en la obra de Godward. En este ejemplo excepcional, los tonos de piel delicada se compensan con un virtuoso despliegue de la técnica en colores saturados de piedras preciosas. La evidencia de su habilidad como dibujante está en todas partes, pero sobre todo en las líneas del retroceso y teselas desigual. Godward estaba interesado en un entorno clásico y el tepidarium, una de las tres habitaciones de los baños romanos, excusas estado desnudo de la modelo. Bañistas suelen entrar en los baños a través del tepidarium, que se calienta a través del calor radiante debajo de los suelos de mármol y paredes antes de proceder a la caladaria y frigidarium , respectivamente, los baños calientes y fríos.






Una agradable tarea. Entre las composiciones más exitosas de Godward se encuentran aquellas en las que las doncellas hermosas están involucrados con las tareas del día a día, como jugar con los gatitos, u otros animales domésticos, en el baño, o simplemente absortas en la ensoñación de ensueño. Un Agradable tarea es particularmente inusual en la obra del artista, representa a una mujer ocupada en trenzar el pelo, 




un tema poco frecuente para el artista, con excepción de dos grandes obras de mujeres desnudas recopilación de sus cerraduras con bandas de tela, Venus atandose su pelo y Toilette (en poder de colecciones privadas). El presente trabajo es parte de una tradición de la antigüedad de la mujer que representa la organización de sus trenzas. Godward habría sabido de diversos mármoles, bronces, y figuras de terracota del Museo Británico de Venus o Afrodita en la fijación de su cabello después de que emerge del mar. Él también habría estado familiarizado con piezas artísticas similares celebradas por el Vaticano y los Museos Capitolinos de Roma, la ciudad donde vivió Godward durante muchos años. Artefactos clásicos también habían inspirado a muchos de los contemporáneos de Godward como Sir Lawrence Alma-Tadema, que utiliza de la Capitolino Esquilino Venus, descubierta en 1874 y que causó un inmediato efecto sobre los pintores de aquella generación:



para informar a la figura desnuda que ata su pelo para el estudio del cuerpo femenino 





en el modelo del escultor (1877), mientras que Edward Poynter utiliza el mismo inspiración para su 





Diadumene (1884) cuyo modelo ata el cabello después de quitar sus ropas en la preparación para el baño. En lugar de representar a su modelo desnuda, Godward toma la decisión difícil de capturar cada pliegue del rico tejido de la túnica, atados y envueltos en atrevidas combinaciones de colores de color granate saturado, de color morado, y de piedras preciosas como el azul. Mientras que la actividad del modelo se inspira en ejemplos clásicos, su postura es decididamente más realista, mientras se sienta con las piernas curvadas hacia arriba, con la mirada baja hacia sus dedos, que se aferran a los mechones de su pelo grueso como ella hace una trenza. En lugar de utilizar múltiples accesorios o artefactos para apoyar la escena, Godward emplea su brillante dominio de mármol para crear un entorno de detalle ilusionista. Las venas abigarradas y colores cambiantes de la piedra contrastan la piel suave de la banda de piel de leopardo manchado. 



Aunque relacionada con la escultura de la antigüedad, así como con los ejemplos renacentistas de Veronese y Tiziano que pintaron la mujer en su retrete, el ideal clásico de la belleza de Godward se basa en última instancia de Alma-Tadema, Poynter, y Frederic, Lord Leighton y evoca un mundo de la contemplación ociosa y la belleza idílica, en la que nada está mal y la vida está dedicada a la búsqueda diaria de placer.







Retrato de Ethel Warwick. Este estudio sorprendentemente directo de una mujer joven, vestida con una toga diáfana, representa la bella modelo y artista profesional Ethel Warwick (1882-1951) cuya imagen dominará el trabajo de Godward por un breve período entre 1898 y 1900. 



Por lo general, prefiriendo un tono más oscuro pelo y de piel aceitunada tipo mediterráneo para la recreación de la belleza de sus fantasías clásicas, la señorita Warwick era más sajona en apariencia. Parece que en la década de 1890 sustituyó a las famosas hermanas Pettigrew (Lily, Rose y Hetty) que Godward había pintado en la década de 1880 y más adelante, como hemos visto anteriormente. Ethel Maud Warwick nació en el pueblo de Northamptonshire Hardingstone en 1882 y parece haber comenzado su carrera como modelo en los años 1890 posteriores para financiar sus estudios de arte en la London Polytechnic. Ella vivía en West Kensington en medio de la comunidad artística y pronto se convirtió en el modelo preferido de Herbert Draper quien la pintó como una ninfa del mar en su famoso cuadro El Lamento por Ícaro en 1898 (Tate). Fue en este momento que Godward conoció a Ethel, y  pintó su retrato vestida de estilo moderno 





(Galería de Arte Russell-Cotes y Museo, de Bournemouth). Godward pronto se dio cuenta de que Ethel no sólo estaba dispuesta a posar desnuda, sino que era del todo inconsciente de estarlo. El fotógrafo Lindley Sambourne había alentado esto preguntando a Ethel para posar para una serie de fotografías desnudas, que se utilizaron en parte para ayudar a la preparación de sus caricaturas. 




Ethel pronto se convirtió en un valor incalculable para Godward como modelo de desnudos y sus características se puede percibir en la escultural  Venus atando su pelo en el año 1897, El espejo  de 1899 (colección particular) y probablemente también el oráculo de Delfos del mismo año y la Preparación para el baño de 1900. Parece que la actual imagen era una pintura de transición entre el retrato y modesta tentativa de 1898 y los desnudos más cargados de erotismo, la seducción de Ethel será sugerida por su vestido transparente y su mirada soñadora y acogedora. 





Ethel era una personalidad seductora y atrajo la atención de los artistas con los que se relacionó. Alrededor de 1900 posó para varias fotografías de Philip Wilson Steer, incluyendo hortensias (Galería de Arte de Johannesburgo) y cuyo cuaderno de dibujo (Victoria y Albert Museum) contiene varias notas coquetas de ella; Una nota dice simplemente "Persíganme muchachos" . Whistler también la admiraba como modelo y tal vez tenía un interés menos profesional en ella también - se decía que quedó devastado cuando se casó-. A pesar de que inicialmente se había entrenado para ser una artista , era una modelo consumada y exitosa, Ethel también tomó lecciones de actuación y en 1900 hizo su debut teatral en la obra Los hermanos corsos en el Teatro Grande, en el Fulham. Ella estaba continuamente en la demanda de los próximos años, su tiempo tomado en su totalidad con obras de teatro en gira. Draper la pintó varias veces en 1905 y 1906, pero sus representaciones cesaron el 24 de marzo 1906, cuando se casó con Edmund Waller, un joven actor guapo del que ella se había enamorado. Con Waller se embarcó en una gira mundial con varias obras de teatro, viajar a través de África del Sur y Australia, pero en 1910 se volvió a Londres y se hizo cargo de la gestión del Teatro de la Reina. En 1915 se divorció de Waller, pero continuó viviendo un estilo de vida glamoroso que no podía permitirse y se declaró en quiebra en 1923. 




A pesar de este contratiempo, a lo largo de los años 1920 y 1930 ella era una actriz muy exitosa en el teatro de Nueva Shakespeare en Stratford-upon -Avon. Muchos miles de tarjetas postales llevan su hermoso rostro y continuaron siendo compradas por admiradores y se encontró aún más la fama en una serie de películas,  como El bígamo. Ella murió en un asilo de ancianos en Bognor Regis en septiembre de 1951 a los 68 años y casi completamente olvidada. Sin embargo, ella ha dejado innumerables imágenes de su belleza, este encantador cuadro pintado por Godward sigue siendo uno de los más recientemente re-descubiertos.






La muchacha de la pandereta. Godward representa uno de sus modelos italianos favoritos como una doncella neoclásica, situado en el centro contra un friso de mármol tallado. El dominio técnico extraordinario de Godward es evidente en el manejo de diáfana púrpura de la joven con la  estola vestis  (la variación femenina de la antigua toga romana), y de inspiración clásica de la bronceada  palla  (manto romano). El artista contrasta con sensualidad estas telas de gasa de vivos colores con la experta a tridimensionalidad del fresco, el friso blanco, que a su vez está acomodado dentro de una pared construida de mármol veteado azul-negro. La pieza finamente esculpida en piedra muestra varias figuras masculinas en la celebración mientras bailan y tocan instrumentos musicales. En una yuxtaposición inteligente de características de primer plano y fondo, Godward relaciona intencionadamente los detalles del friso con el tema de la figura central.
Tres años más tarde, Godward pintaría una escena similar en la que una belleza grecorromana también se destaca en contrapposto  delante de una pared de mármol, pero en este caso las figuras en el friso son mujeres retratadas como doncellas agraciadas como un complemento como el modelo a sí misma. Al hacer pequeños cambios sutiles a la configuración, apoyo, o un disfraz, Godward creó una serie de escenas fascinantes en las que exploró una visión totalmente distinta de la belleza clásica. Al igual que otros artistas de la época victoriana como Leighton, Sir Lawrence Alma-Tadema, y Albert Moore, entre otros, la lealtad de Godward a los temas antiguos se mantuvo constante a lo largo de su carrera y se convirtió en sinónimo de un arte de gran belleza estética y de una gran armonía. 







El oráculo de Delfos. Al año siguiente, Godward pinta de nuevo otra pintura de culto ambiciosa, titulada El oráculo de Delfos (1899). Una de las composiciones más originales y exitosas del artista, la obra indica un conocimiento superficial de la obra de John William Waterhouse y de John Collier. La Pítia desnuda –probablemente Ethel Warwick- mira directamente al espectador, centrando así la atención sobre su forma hermosa. Fue descrita en la literatura de su día: “Absorta en la contemplación de los misterios aún sin revelar del destino, la pitonisa sentada sobre un trípode sagrado , escucha la  voz que le ordena satisfacer o denegar las consultas de los peregrinos al santuario de Apolo Pitio. La mirada recta, profunda, sugiere el funcionamiento de las inexplicables e inexpresivas leyes del control divino sobre el destino humano.
Evidentemente ésta obra, así como algunos detalles de su biografía: la vecindad con Bram Stocker, su relación con JW Waterhouse, podrían llevarnos a sospechar una aproximación de Godward a las sociedades secretas de su tiempo, como la Golden Dawn; no es absolutamente descartable, pero en su obra, salvo éste Oráculo de Delfos, y por los pocos datos que tenemos de su biografía, todo nos indica que lejos de ocuparse en las grandes cuestiones trascendentales, el ocultismo, la magia, etc. Godward se preocupó esencialmente por la búsqueda de la Belleza ideal.





Venus atándose el cabello. El entorno es un anti-cámara en una casa de baños romana donde una mujer de piel dorada voluptuosa queda al desnudo en una piel de tigre, sus prendas hechas a un lado mientras se prepara para sus abluciones. Ella es vinculante para el pelo con una cinta verde, en la forma de estatua de Policleto de  Diadumenos de la que hemos hablado anteriormente . Detrás de ella se encuentra una arcada de mármol abigarrado con capiteles corintios y una cortina decorada con grifos y anthemion de oro, más allá del cual se pueden ver una bañera de mármol serpentina.
Venus atando su pelo se encuentra entre las pinturas más grandes de Godward y se dice que fue pintado en un momento en que el artista buscaba éxito de público y crítica en las exposiciones de la Royal Academy.  Venus atándose el pelo se exhibió un año después del desnudo de Godward Campaspe 





y es del mismo tamaño que éste y otro desnudo el oráculo de Delfos.
La pintura de Godward se exhibió quince años después de la notoria de Edward Poynter Diadumene causó un pequeño escándalo en la exposición Real Academia de 1884. Poynter representa el mismo objeto de una mujer atar un cordón alrededor de su pelo en una casa de baños. Fue acusado de ser deshonestos y Poynter se vio obligado a añadir cortinas 





a la figura desnuda (tan diáfana que hacen poco para ocultar su desnudez). Las obras de Poynter y de Godward se basaron en una estatua de mármol célebre por Policleto de un atleta masculino de unión a su cabello y era probablemente la misma fuente que Alma-Tadema utilizó para su modelo de escultor de 1878 (colección particular) que también fue criticada por su sensualidad. 
Aunque la imagen de Godward fue pintada en un momento en que el escándalo sobre la aceptabilidad del desnudo en el arte ya había pasado, se tuvo la precaución de colocar un título clásico de la imagen. 





Sin embargo su chica atándose el cabello tiene el aspecto de una mortal en lugar de una diosa y es probable que, al igual que con muchos de los títulos de Godward, el nombre de Venus sólo pretende ser una alusión más que un nombre específico. La modelo de Venus atándose su pelo probablemente fue 'Lily' o Lilian, una de las tres hermanas Pettigrew que se trasladaron desde Escocia a Londres para convertirse en modelos del artista y eran los favoritos de Leighton, Whistler, Philip Wilson Steer y Millais, entre otros. Godward pintó las tres hermanas, 'Hetty' Harriet, Rose y Lily desde finales de 1880 y la masa de pelo castaño rojizo y el perfil clásico de Lily aparece en pinturas a lo largo de los años 1880 y 1890.





Un fiel reflejo. No registrado hasta ahora, un fiel reflejo marca un importante descubrimiento en la salida de Juan Guillermo Godward, ya que es sin duda la obra más importante realizada por el artista en 1915, y entre los más ambicioso desde el período que pasó en Italia. Este oleo a gran escala es singular en tamaño dentro de la obra de Godward y, a diferencia de la mayoría de las pinturas de este período, un fiel reflejo no volvió a Londres para ser exhibido y vendido. En su lugar, se mantuvo en Italia, probablemente en el estudio del artista, hasta que fue adquirida por un coleccionista estadounidense en la década de 1940. 
Tal vez porque se mantuvo en el continente, el trabajo nunca fue inscrito con uno de los títulos más característicos de Godward como lo fueron casi todas las pinturas de su época romana. Títulos como Memorias , contemplación o expectativa, infunden modelos un tanto separados de Godward con la narrativa, ya que su trabajo es esencialmente sin carga dramática y conscientemente desprovisto de cualquier sugerencia de movimiento o de emoción. Mientras que el título de este trabajo no es original, es una opción apta como un fiel reflejo se refiere a un lienzo de 1899 del modelo del artista mirandose a sí misma en un espejo. Más logrado y tal vez más conscientes de su virtuosismo, Godward elige para mostrar el lado del vidrio del espejo y refleja el mármol en ella, un gesto con la cabeza a su reputación como "el amo de mármol." Además, Godward ha reflejado el mármol sobre sí misma, como se ve en el apoyo de la tabla que refleja la pared detrás de él, un impresionante telón de fondo de piedra abigarrado que proporciona un escaparate para la incomparable capacidad de Godward para pintar texturas.




Este reciente descubrimiento añade una obra maestra de la obra conocida de las bellezas de estilo clásico de Godward. Pintó numerosos retratos tres cuartos de longitud, pero pocos son tan excepcionalmente resueltos como un fiel reflejo. La modelo está vestido con una hierba de color verde estola (la forma femenina de la antigua toga romana), elaborado con fuerza a la cintura con una Palla (manto romano) de un color vino profundo, y atado con una cinta amarilla con dibujos pintados exquisitamente. Su cabello está trenzado en una larga en cascada, que se está preparando en la parte superior de su cabeza usando las horquillas de oro que descansan sobre la superficie de mármol delante de ella.





La modelo fue la favorita de Godward, una mujer italiana que algunos estudiosos sugieren que puede haber sido su amante. El artista había salido de Londres en 1911 para establecer su residencia en un estudio en el Villa Strohl en Roma y, según la tradición de la familia Godward: "Se fue deprisa, corriendo con su modelo italiano a Italia ... Su madre nunca lo perdonó por esta violación de la conducta. Se sorprendió a la familia al vivir con su modelo. En esta pintura, su afecto por ella es inmediatamente evidente cuando él la ha elevado a la categoría de una diosa.
La composición también muestra muchas de las características de la estética de Sir Lawrence Alma-Tadema y el interés de estilo victoriano en el renacimiento del clasicismo y la antigua Roma, que prevalece en el comienzo del siglo XX, que promovió la importancia de las cualidades formales y sensuales sobre el visual narrativa. A pesar de las influencias que absorbe Godward, sin duda, su arte tenía un estilo distintivo. Su visión de la edad antigua era de oro de una utopía, un mundo de terrazas de mármol por el océano donde el sol es lo suficientemente caliente para persuadir a sus diosas terrenales rodeadas de flores y del mar azul.



Esta pintura será exhibida en un marco creado especialmente para esta pintura. Godward favoreció marcos clásicamente derivados como este estilo marco tabernáculo. El marco del estilo del tabernáculo se originó durante el Renacimiento y evolucionó a lo largo de los siglos, pero nunca desaparece del todo, hasta que se hizo especialmente popular de nuevo en la 19 ª siglo. Pintores británicos como Frederic Lord Leighton y Sir Lawrence Alma-Tadema a menudo eligieron, e incluso diseñaron, los marcos para sus pinturas. 
La parte inferior del marco emplea una base poco profunda simple que ofrece un motivo de huevo y dardo clásica; al lado de un par de pilastras estriadas se extienden hasta cada lado y que a su vez están coronados por capiteles de orden jónico. Toda la estructura está coronada por un frontón que se remata con ornamentos clásicos que incluyen una moldura, el huevo y el patrón de dardos, y un friso adornado con un patrón foliadas.




Cuando el corazón es joven

La Galería Thomas McLean exhibió  “cuando el corazón es joven”  en su exposición anual de invierno de 1902. Aunque el trabajo era uno de los más importantes cuadros de la época de Godward, pronto se perdió durante más de un siglo. El modelo de pelo negro en esta pintura recién descubierto está vinculada a una serie de obras maestras de Godward de la década de 1900, incluyendo Sweet Dreams (1901), Flores de verano (1903), y Dolce Far Niente (1904, Andrew Lloyd Webber Collection). Mientras que el pelo de la modelo está perfectamente labrado encima de su cabeza en las otras obras, aquí, sus cabellos ondulados brillantes se derraman libremente sobre su pálida mano y el banco de mármol veteado. Aunque pintada antes de estancias italianas del artista, “cuando el corazón es joven” ilustra el atractivo del Mediterráneo: las largas líneas curvas del cuerpo de la modelo, apoyada en una piel de leopardo se repiten en las cimas de las islas de Ischia a lo largo de la línea del horizonte, mientras que los ricos verdes de las viñas que crecen sobre sus pérgola parecen llegar hacia la figura descansando mejorando aún más la escena sensual. La gama de colores de la tela rosada de la toga, obligado por las cintas de oro y azul pálido de la estola, se repite en las amapolas estudiadas bellamente en flor en un huerto. La inclusión de las flores es uno de los muchos elementos de la composición que apuntan al interés del estilo victoriano en el renacimiento del clasicismo y de la antigua Roma, que prevalece en el comienzo del siglo XX, lo que favoreció la forma y la belleza sobre la narrativa visual. En la mitología grecorromana, la amapola roja simboliza el olvido, el sueño, y la resurrección, y se decía que crecen a lo largo de las orillas del río Leteo al entrar en el Hades. Si bien es probable incluido por razones decorativas más que alegóricos, las amapolas se suman a la languidez exótica de “cuando el corazón es joven”. Como su título indica, todos los aspectos de la pintura de Godward forma una completa visión de la belleza juvenil perdida en soñar despierta, romántica; a partir de los soñadores, piscinas profundas de los ojos en forma de almendra del modelo para el abanico de pavo real, descuidadamente caído sobre un suelo de mosaico, todo lo relacionado con la escena sugiere que descansa en espera de algún descubrimiento.  




Dolce far niente
La belleza lánguida disfrutando de los rayos del sol en el presente trabajo personifica su título, Dolce far niente. Godward empleó la frase italiana ilustrativa (que se traduce como "la belleza de no hacer nada") para varias composiciones en su obra, que datan de 1897  y 1904. Sin economía narrativa, el espectador es invitado a quedarse en este lugar sin tiempo, rico en superficies luminosas de mármol veteado y el granate de color, telas de inspiración clásica suavemente cubiertos por el cuerpo de la joven, que se apoya en las texturas de felpa de una piel de leopardo. Con su cabello castaño oscuro se derrama sobre la piedra nacarada, los ojos desenfocados en sueños, la modelo está completamente relajada; las largas líneas curvas de su brazo hacia arriba, las caderas y las piernas extendidas se repiten en las cimas de las islas de Ischia a lo largo de la línea del horizonte, mejorando aún más la escena sensual. Mientras que un espacio imaginario, la vegetación netamente mediterránea, adelfas en flor y vista abierta al mar turquesa. Referencia a los viajes del artista a Italia el año anterior. Godward salió de su casa en Londres para el Continente probablemente por primera vez en 1905, con cuadernos de dibujo que sugiere que visitó Nápoles, mientras que su familia sospechaba que viajó a Capri y todo el sur de Italia. 
Al igual que con muchas de las imágenes más populares de la década de peras siglo XX, con McLean, hizo una impresión del mismo tamaño que dolce far niente disponible por el precio de compra de 115 £. En el 2013, éste cuadro se vendió en Sotheby por 1.556.000 $, sin ser -ni mucho menos- la obra más cara de Godward vendida en subasta pública.





La mascota tranquila

Lass mujeres solitarias, contemplativas y no afectadas de las pinturas de Godward también pueden ser vistos como un reflejo de la propia personalidad y la disposición del artista. Su madre de la iglesia Evangélica, y su religiosidad y la gravedad dejó claramente una impresión en su hijo. Esto puede haber sido la razón por la que muy raramente presentaba a las mujeres desnudas, sino que preferentemente lo hacia veladas en túnicas vaporosas. En la mascota tranquila, la tela es de un color rosa oscuro, como en su obra maestra Horas de oro. Los pliegues meticulosas muestran la influencia de Leighton, cuyo trabajo admiraba Godward, mientras que la placa de cerezas es tomado de las pinturas de Edward Poynter colega clasicista. Composición de sir Lawrence Alma-Tadema, 





tranquilas Mascotas, en el que una mujer romana se encuentra en compañía de tortugas, es probable que otra influencia.





Este tema, fué retomado en otras pinturas, sustituyendo las "tranquilas" tortugas por otros animales -loros- o gatos como en las dos imágenes anteriores. 







Belleza en un cuarto de mármol

Belleza en una habitación de mármol fue pintado en 1894. Si bien no hay prácticamente la mínima anécdota en la mayoría de los cuadros de Godward, la restricción narrativa en el presente trabajo es particularmente convincente. Desprovisto de carga emocional -, así como de accesorios de estudio - la imagen es un ejercicio visual impresionante en forma y textura, así como un estudio sorprendente en contrastes. Una joven mujer de pelo castaño plantea contra un telón de fondo de mármol veteado muy pulida. Swanson señala que de Godward "fascinación con las posturas torpes de sus composiciones de una sola figura refleja la obra de Joseph Albert Moore". De hecho composiciones de finales de 1860 y principios de 1870 ofrecen una figura femenina cubierta solitario en contrapposto sutil se presenta en un formato vertical de Moore muestran una cierta afinidad con el presente trabajo. La superficie dura y geométrica de las tres bandas de mármol (pared superior, la pared inferior y el suelo) se ve acentuada por la calidad suave, orgánica de la piel y el cabello de la mujer. La naturaleza arrugada del vestido de espuma de mar diáfana es contrastada por la estola de lunares gráficos envuelta alrededor de sus caderas; el contorno de su cuerpo es visible a pesar de las capas de tela, llamando la atención su translucidez. La transitoriedad implícita y la vulnerabilidad de su forma juvenil envuelto en telas delicadas, transparentes proporcionan una lámina sorprendente con los ideales de la fuerza y la atemporalidad sugeridas por el ajuste de mármol.  Otra pintura de la misma época:





El Pintor británico John William Godward, uno de los más destacados neoclásicos victoriano, construido de una ilustre carrera en la creación de imágenes de belleza femenina idealizada con un lenguaje de inspiración grecorromana. Aunque en gran medida influenciado por su mentor, Sir Lawrence Alma-Tadema, Godward se distinguió por su predilección por la figura femenina solitaria. En su estudio de los pintores victorianos de temas clásicos Christopher Wood describe la carrera de Godward; "... la mejor y el más importante de los seguidores de Alma-Tadema fue John William Godward ... Durante toda su vida se dedicó únicamente a los temas clásicos, invariablemente la participación de las niñas en trajes clásicos sobre terrazas de mármol, pero pintado con un grado de dominio técnico que casi rivaliza con la de Alma-Tadema. Godward era también un admirador de lord Leighton, y sus figuras a veces alcanzan una monumentalidad que falta en el trabajo de la mayoría de los seguidores de Alma-Tadema "(Christopher Wood, olímpicos Dreamers, pintores clásicos victorianos 1860-1914 , Londres, 1983, p. 247).





Esperando una respuesta

El pintor británico John William Godward, uno de los más destacados neoclásicos victoriano, ha construido de una ilustre carrera en la creación de imágenes de belleza femenina idealizada concebido dentro de un lenguaje de inspiración grecorromana. De acuerdo con Vern Swanson, Esperando una respuesta es una de las pinturas más ambiciosas de 1889 Godward, con uno de los modelos preferidos y más frecuentemente empleados del artista. Pintado en un formato más pequeño, Godward crea una escena compleja y sugerente, compuesta de muchas capas, tanto espacial como psicológicamente. Con la inclusión rara de una figura masculina - posiblemente un autorretrato de acuerdo con Swanson - Godward imparte una narrativa convincente en este trabajo. El apuesto joven espera pacientemente que la belleza joven voluble considere su declaración de amor. Ella evita deliberadamente su mirada  distraídamente tirando de una hoja de palmera. Una tensión física es creada por la franja de espacio entre los dedos y el codo; transmitir aún más el tema del amor no correspondido.
Esperando una respuesta revela la maestría de Godward para imbuir a sus cuadros con un elemento táctil. El espectador es inmediatamente capturado por las diversas texturas distintivos y atractivos, ejemplificados aquí por el frío mármol dura y brillante, y suave, tersa piel de animal. Los exuberantes matices del mármol y el modelo gráfico de la piel de leopardo imparten un aire de lujo y refinamiento a la pintura. El suelo de mosaico perfectamente detallado destaca, además, la linealidad del espacio arquitectónico. Una recesión profunda en el espacio se destaca por el pequeño atisbo de cielo azul visto en la distancia y la sugerencia de un patio al aire libre bañado por el sol. Al igual que en todas sus representaciones de las estructuras romanas de inspiración clásica, el elegante palacio de Godward es un escenario ideal para las actividades amorosas de los jóvenes amantes. 








Contemplación
La doncella de cabello oscuro y ojos llenos de estrellas, plena de voluptuosa languidez se apoya contra una pared de mármol frío, su cuerpo ligeramente retorcido, adopta una sensual pose. Aunque el título de la pintura de Godward es "contemplación", sus suaves ojos, los labios fruncidos con suavidad, y la expresión serena parecen sugerir que ella está perdida en una ensoñación aún más dulce. Esta cálida mujer carnosa, con delicadeza revestida en tela vibrante, diáfana, frente a un fondo de mármol frío, es la última de las "bellezas clásicas” de la extensa obra de Godward, y por diversos motivos, su heroína más conmovedora. La suave tranquilidad de la imagen se ha reforzado aún más por la interacción armoniosa de colores y texturas, lo que demuestra la maestría sin par del artista. Godward destacó en composiciones de una sola figura - tal vez un homenaje a su personalidad solitaria - lo que permitió a su pincel tratar con amor el rostro de la modelo y el flujo de fluido sobre la superficie. 
Existe otra versión anterior de 1903 con el mismo título:





Godward fue un pintor prolífico de temas clásicos y durante toda su carrera de cuarenta años se centró únicamente en un mundo imaginario griego y romano, idílico. A diferencia de muchos otros artistas, Godward no necesitaba pintar para ganarse la vida, y por lo tanto sus composiciones fueron 'directamente dictadas desde su alma.' En muchos aspectos, Godward era el equivalente de Alma-Tadema, Leighton, Poynter, y Moore, pero durante su vida, él nunca recibió una cantidad comparable de reconocimiento público. Esto se debió en gran parte al hecho de que a medida que la pintura de Godward alcanzó su zénit, la pintura de género clásico estaba siendo eclipsada por el aumento ulterior de la modernidad y la desilusión amarga de la humanidad después de la Primera Guerra Mundial. 
Por lo tanto, La contemplación no es sólo la última pintura de Godward, sino también uno de los últimos cuadros en todo el movimiento clásica en el arte británico.  En 1887, Godward aseguró su entrada en la Real Academia con su pintura, un turbante amarillo , y continuaría exponiendo allí hasta 1905, cuando se trasladó a Italia en su primer viaje. El trabajo de Godward fue admirado por el comerciante de arte prominente, Arthur Diente, y compró diez de los primeros aceites del artista. Al año siguiente, Godward transfiere al comerciante de arte Thomas Muller McLean, que fue uno de sus grandes valedores. Godward era  un artista productivo y consistente, con una producción media de quince a veinte pinturas de alta calidad al año. Sus ingresos se complementaron con reproducciones grabadas de sus imágenes, haciéndole bastante popular en el mercado victoriano de clase media. Durante los siguientes veinte años, Godward iba a vivir y trabajar en varios estudios de artistas a través de Londres, incluyendo Bolton Studios, un hervidero de artistas clásicos y el tranquilo, solitario Nº 410 Fulham Road. Se llenó los estudios con mármoles, estatuas antiguas y objetos antiguos para crear un ambiente grecorromano y llevar su mundo imaginario a la vida. 
Seleccionó a sus modelos entre un pequeño grupo de profesionales y tenía una fuerte preferencia por aquellas con características italianas, que a su juicio hacía a sus imágenes de forma convincentemente clásicas. En su interpretación de estas mujeres, evitó –en parte- el ideal "clásico" para capturar sus personalidades, características verdaderas, y cuerpos calientes. Godward vistió estos organismos en una variedad de ropas etéreas, colores brillantes y stolas y las puso en contra de escenas clásicas increíblemente representadas. 
Los años 1910 y 1911 marcan la máxima altura de la fama de Godward en el mundo del arte británico e internacional. Un año más tarde se trasladó a Italia, donde residiría durante los próximos diez años. En Roma, Godward vivió y trabajó en la excéntrica Villa Stohl, una colección de estudios de artistas con un extenso jardín de esculturas, follaje exuberante y exótica fauna silvestre. En un primer momento en esta villa un refugio para su mente clásica, pero a medida que más y más artistas se sintieron atraídos por el modernismo, comenzó a sentirse aislado. En mal estado de salud y con la moral baja, Godward, finalmente, regresó a Londres en 1921. 




Contemplación está impregnada de un profundo significado. Los detalles de la investigación sobre la muerte de Godward revelaron el nombre probable de la mujer que posó para contemplación . La modelo llamada Marietta Avico de Tottenham Court Road, dio pruebas de que ella era una de las últimas personas que vieron con vida a Godward. Ella indicó que ella le había conocido durante dieciocho meses y sitúa su encuentro en la primavera de 1921, cuando el artista regresó a Londres desde Roma. Por tanto, es probable que ella era el modelo para todas sus últimas imágenes de 1921 y 1922, que parece representar la misma mujer morena con un perfil fuerte; incluyendo los retratos de perfil derecho Praxilla , Ismene , Crispinella , Megilla . Era evidente que conocía lo suficiente como para que él confiara en ella su tristeza y su creencia de que: “una edad de sesenta años es suficiente para cualquier hombre”; un comentario curiosamente íntimo para hacer a una modelo profesional.  

Listado de obras (probablemente incompleto):
c.1880-1881
·         Retrato de María Godward Perkington
do. 1882-1883
·         Retrato de María Godward Frederica
c.1883
·         Casa de Campo en el siglo 18
c.1887
·         Expectativa
·         Popea
·         Retrato de Harriet (Hetty) Pettigrew en vestido clásico
·         Retrato de Lillian (Lilly) Pettigrew en vestido clásico
·         Un turbante amarillo
do. 1887-1888
·         Rosal japonés
·         Una Cabeza romana
1888
·         Una belleza en el perfil
·         Una belleza oriental
·         El anillo de compromiso
·         Flo
·         ianthe
·         Lirio
·         Threissa
·         el Tiff
·         A la espera de la danza
1889
·         callirhoe
·         Reverie griega
·         Una muchacha griega
·         Cabeza de una mujer romana 
·         Ianthe
·         Su regalo de cumpleaños
·         Esperando una respuesta
1890
·         Un baño pompeyano
·         athenea
·         Flores de Venus
1891
·         Un Señora de Pompeya
·         Diversión inocente
·         La dulce siesta de un día de verano
1892
·         En el jardín de la capilla, Pompeya
·         belleza clásica
·         Pensamientos muy lejos (formato apaisado)
·         Pensamientos muy lejos (formato vertical)
·         Apoyándose en el balcón
·         los novios
·         El patio de la escuela
·         Con las violetas enrrolladas y el traje de la tona
1893
·         Una sacerdotisa (desnuda)
·         reflexiones
·         Si o no
1894
·         Una sacerdotisa
1895
·         Travesura y reposo
·         La Musa Erato En Su lira
·         Tigerskin (fecha incierta)
1896
·         Campaspe (desnuda)
·         Me quiere, no me quiere
1897
·         Dolcefarniente (primera versión)
·         Venus Encuadernación su pelo , por 1.897 (desnuda)
1898
·         En la puerta del templo
·         pensamientos ociosos
·         En el balcón (primera versión)
·         El anillo
1899
·         el ramo
·         El oráculo de Delfos
·         El espejo
·         La señal
1900
·         Ociosidad
·         El Ataúd de la joya
·         El inodoro
1901
·         En La Puerta del jardín
·         Chloris
·         Chica En paños amarillos
·         horas ociosas
·         Dulces sueños
·         el favorito
·         la costurera
·         Venus en el baño (desnuda)
·         La juventud y tiempo
1902
·         Una cabeza de la niña italiana
·         Muchacha de baile jónica
1903
·         Amarilis
·         Flores de verano
·         El Viejo, Historia
·         el Rendezvous
1904
·         La melodía (o una melodía )
·         Dolcefarniente (segunda versión)
·         En los días de Safo
1905
·         Una belleza griega
·         Una matrona romana
·         Flabellifera
·         Travesura
1906
·         drusilla
·         Nerissa
·         La chica de la pandereta (primera versión - niña frente al espectador)
·         La chica de la pandereta (segunda versión - la muchacha que descansa contra la pared)
1907
·         La carta de amor
1908
·         Un clásico de la señora
·         Una muchacha griega
·         Ismenia
1909
·         Una belleza clásica
·         Una preciosa griega (fecha incierta)
·         En las termas (semi desnudo)
·         tympanistria
1910
·         Un refugio fresco
·         Resto del mediodía del día
·         Reverie (primera versión)
·         Safo
1911
·         En los reinos de la fantasía
·         En el balcón (segunda versión)
1912
·         una cita
·         La ausencia hace crecer el cariño
·         Una ofrenda a Venus
·         En el camino
·         Reverie (segunda versión)
·         Sabinella
·         El ventilador del pavo real
1913
·         Horas de oro
·         En el tepidarium (desnuda)
·         La Pensierosa
·         Le Billet Doux
·         el Belvedere
1914
·         El collar
·         El nuevo perfume
·         Tranquilidad
1915
·         En el mejor momento de la temporada de verano
1916
·         Los pasatiempos antiguos
·         Por el azul del mar Jónico
·         Lesbia Con Su Gorrión
1917
·         Una charca del lirio
·         El vendedor de la fruta
·         Debajo del flor que cuelga en la rama
1918
·         Una despedida
·         Los sonidos dulces
1920
·         Una Rose roja, roja
1921
·         Megilla
1922
·         Contemplación
·         Nu Sur La Plage 

Godward volvió a Inglaterra en 1921, las dolencias del artista siguieron aumentando con su sufrimiento de una úlcera péptica, el insomnio y la melancolía.  De acuerdo a José Menor, puede haber sufrido de depresión que le golpeó con fuerza en la Villa-Strohl en Italia, después de la Gran Guerra. Había regresado a un mundo del arte británico completamente extraño y hostil. Tal vez, el artista también comenzó a sentir que la calidad de su arte estaba empezando a ceder un poco, aunque esto es imposible determinar a partir de su trabajo. Godward se dio cuenta de su difícil situación. Fue precariamente siguiendo una senda entre la angustia y el rechazo. En lugar de continuar su miseria y ver a su arte sufrir a través de una disminución de la capacidad de pintar, el artista se suicidó el miércoles 13 de diciembre de 1922, a la edad de 61 años, poniendo su cabeza en un horno de gas y se dice que dejó escrito en su nota de suicidio que "el mundo no es lo suficientemente grande para mí y un Picasso". 
Una desafortunada víctima de su propia personalidad, incapaz de abrirse camino en un mundo hostil, Godward simplemente terminó con todo. Está enterrado en el cementerio de Brompton, al oeste de Londres.



Su familia ya distanciada, que había desaprobado que se hubiera convertido en artista,  y su escapada a Roma con una modelo, se avergonzaban de su suicidio –en aquel entonces considerado un crimen horrendo- y quemaron todos sus papeles, incluidos borradores, cuadernos, etc. Por lo que no hay fotografías de Godward. Las obras que todavía estaban en su estudio fueron vendidas en subasta. 
A continuación os invito a ver una presentación con la mayoría de las obras de éste extraordinario artista:




Como siempre, espero que os haya sido útil e interesante.